Capitulo 4 - Repite una vez más

 "¡Ishtariel mocoso arrogante! ¡¿Cuántas veces debo repetirte que tienes que levantar un solo pie antes de lanzar esa patada?!" Theron rugió furioso. "¡El torbellino giratorio es un Arte Marcial que requiere un orden! ¡Saltar como un idiota no te hará hacerlo bien! ¡Vamos, repite una vez más!" Resopló. Han pasado nueve años desde que Vespera trajo consigo a Ishtariel a la Secta y cinco desde que Theron lo ha estado entrenando en diversas Artes Marciales, para reforzar su cuerpo e iniciarlo en el Dao. Antes de iniciar su camino por el Cultivo requiere un cuerpo muy fuerte, de lo contrario no formará adecuadamente su Energía Interna. Sin embargo, modifica todo lo que le enseña y crea cosas propias. Podría ser llamado en otra situación un niño prodigio, pero para Theron, quién es extremadamente recto, es un dolor de cabeza.

"Pero Maestro, si le agrego una vuelta más a mi cuerpo la energía centrifuga que generaré me permitirá dar una patada aún más poderosa..." Ishtariel se quejó. El Torbellino Giratorio utiliza la fuerza centrífuga para generar una poderosa patada giratoria. Para hacerlo, se gira rápidamente sobre un pie mientras se levanta la pierna opuesta para liberar una patada circular a gran velocidad. Esta técnica es excelente para desequilibrar al oponente y puede usarse para ataques en múltiples direcciones. Sin embargo, Ishtariel descubrió que si salta al dar la patada o gira una vez más el poder de sus piernas aumenta. Pero aún así, a Theron parecen no gustarle sus innovaciones, siempre lo hace corregir sus posturas.

"¡Te digo que no maldición! ¡tienes que hacerlo como te lo enseñé!" Diciendo eso hizo una demostración de como se debe hacer adecuadamente. "¡Pero demonios! ¡No se porque sigo insistiendo! ¡Eres solo otro idiota que no conoce la inmensidad de los Cielos!" Continuó quejándose. Luego, miró hacia el cielo azul y dio un largo suspiro antes de seguir. "Escúchame niño, tanto las Artes Marciales como la Magia tienen un orden prestablecido, si te los saltas o los modificas podrías dañarte severamente. Ya me estoy cansando de repetir esto una y otra vez. En unos años serás presentado como el Joven Señor de la Secta, así que debes hacer las cosas bien o los otros discípulos no te aceptarán como tal". Lo miró.

"Pero la Maestra Elandra siempre me elogia cuando realizo cambios a las magias que me enseña, el Maestro Malachai por otro lado me pide mi opinión cuando me enseña sus Artes de Sombras y la Maestra Valeriah dice que soy un niño prodigio". Levantó el pecho con orgullo. "Tú eres el único que..." No pudo terminar sus palabras ya que vio la molestia obvia en la expresión de Theron. De los Cuatro Maestros Guardianes solo Theron pareciera tener un rechazo hacia él.

"Ese trío de idiotas no saben nada" Resopló molesto.

"Maestro, ¿es cierto que su genio corto es culpa de su edad?" Sonrió.

"¡Mocoso insolente! ¡Maldita Elandra sigue enseñándote estupideces!"

"¡Lo siento Maestro! ¡Por favor no me..." No pudo terminar su frase de suplica ya que Theron se acercó en un instante, le dio una patada y salió volando.

"¡Ponte de pie!" Rugió. "Ya es suficiente del Torbellino Giratorio, aprenderás ahora el Puño Sonico" Diciendo eso movió su cuerpo e hizo una demostración perfecta de la habilidad. "Esta técnica combina el poder del golpe de un puño con la velocidad del sonido. Debes canalizar tu energía en un solo puñetazo, el cuál se desplazará a una velocidad supersónica y generará ondas de choque devastadoras al impactar el objetivo". Tan pronto terminó de hablar desde su puño extendido se generó una poderosa onda que salió disparada a gran velocidad contra un árbol cercano haciéndolo trizas al instante.

"¡¿Eso fue magia?!" Desde el suelo Ishtariel vio como Theron destruía un árbol desde algunos metros, como si hubiese lanzado algún encantamiento. "Pero Maestro" Se puso de pie y se sacudió el polvo. "¿No me dijiste que no usaríamos magia en nuestros entrenamientos?" Lo miró perplejo ya que no sabe la razón.

"Veo que tendremos que entrenar tu vista" Sacudió la cabeza. "El Puño Sonico es un Arte Marcial, no es magia. Cualquier cultivador entrenado podría hacer algo similar. Lo comprenderás cuando entres en el camino del Dao. Pero no tienes que preocuparte, solo queda un año para ello. Cuando entres oficialmente a la Secta como Novicio tus nuevos Maestros te enseñarán adecuadamente. El Reino de la Iniciación requiere un cuerpo sano y fuerte, no debes olvidarlo".

"¡Si Maestro!" Respondió con rectitud. "Bien, lo intentaré". Diciendo eso comenzó a practicar.

Theron asintió y lo miró profundamente. Hace cinco años Vespera se lo entregó y desde entonces le ha enseñado lo básico del fortalecimiento corporal. Al principio su corazón le seguía diciendo que era peligroso, incluso sus instintos gritaban que debía matarlo para evitar una calamidad futura. Pero conocerlo le ha permitido amarlo, como si fuese un padre, por eso es tan estricto con él. Pero dado su duro carácter, es algo que nunca dirá en voz alta. También siente orgullo cada vez que Ishtariel modifica alguna de sus técnicas, después de todo eso es algo que solo Artistas Marciales experimentados serían capaces de hacer, pero esto es algo que tampoco reconocerá ya que solo haría que los humos se le suban a la cabeza y en Celesterra, quiénes no conocen la inmensidad de los Cielos suelen morir muy prematuros.

Por alguna razón que desconoce, Ishtariel tiene tanto Energía Interna de Atributo Yang como de Atributo Yin, lo que lo hace un ser único. A Theron le costó mucho asimilarlo ya que incluso con su alto Reino de Cultivo y sus muchos años de experiencia nunca había conocido una criatura con esas características. Sin embargo como la Secta del Loto Creciente promueve la filosofía del equilibrio y la armonía con la naturaleza, ¿qué puede ser más equilibrado que lo que sucede dentro del cuerpo de Ishtariel? Pensar en ello fue como una epifanía, por lo que el miedo irracional que sentía hacia él fue reemplazado por un anhelo de descubrir en que se convertirá. Con este nuevo propósito le enseñó sin reprimirse, e incluso le agradeció a los Cielos por regalarle a un niño tan especial. Se prometió a si mismo hacerlo un buen hombre.

"¡Maestro, Maestro!" La voz de Ishtariel lo despertó de sus pensamientos. "Creo que ya entiendo la base del Puño Sonico, pero si giro mi muñeca justo antes de liberar su energía puedo dirigir el poder destructivo hacia otro lugar" Hizo una demostración y justo antes de lanzar el puñetazo giró su muñeca hacia arriba, lo que hizo que una diminuta onda saliera disparada hacia el cielo. "¿Lo ve? Es muy simple solo..." Su entusiasmo terminó tan pronto vio la expresión de Theron.

"¡Estúpido mocoso, ¿cuántas veces debo repetirte lo mismo?!" Rugió enojado.


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